sábado, diciembre 3

Las TIC en la sociedad y la educación

Más allá del impacto económico, se ha comprobado que las TIC pueden también ejercen efectos positivos en la sociedad en áreas tales como mejoramiento del sistema educativo, mayor eficiencia en la entrega de servicios públicos, mejor calidad de servicios de sanidad, seguridad pública y mayor eficiencia energética.
El presente siglo enfrenta una Era de la Información o de la revolución de las tecnologías de la información y la comunicación (TICs), cuya característica fundamental es posibilitar el establecimiento de una sociedad basada en el acceso a la información y al conocimiento, proceso que ya viene revolucionando a la economía y a la sociedad en general.
Lo interesante de las TIC es que existe la marcada necesidad de mejorar la calidad de la educación, salud, así como fomentar el empleo tecnológico; garantizar seguridad implantando la vigilancia electrónica; incrementar la transparencia y efectividad; aumentar la productividad y competitividad; y, desde luego, hacer una mejor participación ciudadana, razón por la que resulta un imperativo incursionar con una visión futurista en el campo tecnológico, conscientes de que los transformadores resultados no se harán esperar. Será clave, a efecto de identificar y llevar adelante iniciativas concretas y viables para el desarrollo de las TICs en todos los campos del saber.
Las tecnologías de la información y la comunicación (TIC), interviene hoy en día en el urbanismo, el consumo energético, la economía. Estas soluciones vendrán en buena medida de la mano de un uso intensivo de la tecnología disponible que permitirá monitorizar los diferentes elementos y dinámicas de una ciudad.


En definitiva, se trata de utilizar la tecnología para transformar las sociedades y hacerlas más humanas y sustentables. Aunque la tecnología en las ciudades podría llegar a ser casi ubicua, ya que no estamos ante una revolución meramente tecnológica puesto que las TIC proporcionan a la sociedad soluciones como las que ya están disponibles en la actualidad y son: contenedores de basura inteligentes que avisan a la central cuando necesitan que los vacíen, parques y jardines sensores que se riegan solos en función de la humedad del terreno y siempre que los radares meteorológicos a los que están conectados no indiquen previsión de lluvias, o farolas que solo se conectarán cuando haya peatones en las proximidades. Con ello se pretende un ahorro de agua y electricidad pero también se evitará el uso innecesario del combustible, tanto en desplazamientos privados como en rutas de recogida de basura innecesarias. Todas estas pequeñas mejoras comparten dos elementos en común: los sensores y las redes TIC. Estos dispositivos permitirán monitorizar cada uno de los elementos de una ciudad y saber qué se necesita en cada momento, y a través de redes de comunicación, compartir información y determinar si se debe regar el parque, vaciar los contenedores o conectar las farolas de una determinada calle.
La diversidad cultural ha existido, pero hoy gracias a los medios de comunicación nos queda todo mucho más cerca y hechos ocurridos en otro punto del mundo es sentido, a los pocos minutos del suceso, como cercano y casi propio.
Gracias a las Tecnologías de la información y Comunicación se eliminan las distancias, y las formas de comunicación entre las personas han cambiado. Cuando se habla de las TIC se refiere a la informática, telecomunicaciones, tecnologías de sonido imagen, así como telemática y multimedia, y la radio y televisión. La velocidad de las telecomunicaciones junto con la creciente intensidad de los flujos migratorios está contribuyendo a disolver fronteras nacionales, al menos con los rasgos que hasta ahora existen. Pero se están generando fronteras más duras y difíciles de eliminar. Son las fronteras creadas por la disparidad económica y el desigual acceso a los recursos mediáticos y tecnológicos. Es la frontera que te impide acceder a la sociedad de la información, como lo menciona Bernal (2007), la globalización económica y cultural, el libre movimiento de personas y capital, el continuo avance en la ciencia los cambios sociales y de formas de relacionarnos.
El no pertenecer a esta sociedad supone un importante freno para la formación y desarrollo y considero que será la mayor frontera en los tiempos venideros.
Existe una frase “quien tiene la información tiene el poder” hoy en la actualidad podemos considerar esta frase vigente. La participación de la sociedad civil, el sector privado y el sector público. Debemos dar un paso adelante y pasar de ser una sociedad de la información a la sociedad del conocimiento. Es conseguir una sociedad informada capaz de seleccionar, ordenar, comprender y generar un nuevo conocimiento, a partir de la riqueza cultural de diferentes grupos que conviven un mismo espacio.

Como dice Burch (2005), por un proyecto de sociedad donde la información sea un buen público, no una mercancía, la comunicación un proceso participativo e interactivo, el conocimiento una construcción social compartida, no una propiedad privada, y las tecnologías un soporte para todo ello, sin que se conviertan en un fin en sí.
La creciente incorporación de las tecnologías de comunicación e información a la vida diaria ha generado la necesidad de estar al paso con ello en los diversos ámbitos de las instituciones de educación ya que impactara de manera positiva en los servicios que se ofrecen.
Se requiere que cada institución diseñe un programa institucional de planeación e investigación tecnológica, que le permita implantar e integrar el uso de las tecnologías en sus currícula, con la finalidad de desarrollar, identificar y socializar modelos innovadores para cubrir las necesidades de formación profesional, investigación y comunicación en todas las dimensiones de la vida escolar, social éticas y culturales a través de un uso responsable, donde se desarrolle creatividad y construyan aprendizajes junto con otros.

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